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viernes, 29 de marzo de 2019

Morir con las botas puestas.

 He visto el vídeo de un compañero en Arganda, que por fin se jubila con sesenta y cinco años.
Tras unas décadas vistiendo de verde, creo que puedo dar mi opinión al respecto.

  El vídeo es muy emotivo, los compañeros le aplauden, el tipo se emociona etc. muy de película yankee, oye que no digo que no, seguro que se lo merece, no lo niego, pero yo voy a contar la cara "B" del disco, que ya está muy rayado.

   Seguramente vive en un pabellón, y claro está, con la mierda de sueldo y allí en Madrid, meterse en una hipoteca será misión suicida, sé de muchos que por no perder el pabellón oficial y ahorrarse un alquiler o tener su vivienda alquilada, para que se pague sola, aguantan hasta última hora viviendo en un cuartel, con las secuelas psicológicas que conlleva, por que no nos engañemos, vivir en un cuartel no es la panacea, si no todo lo contrario, todo el que ha vivido en uno me lo podrá corroborar, pues mas sabe el loco en su casa que el cuerdo en la ajena. Por suerte y con mucho sacrificio económico llevo diecinueve años fuera de uno y es otro mundo.

   La otra cuestión, también está relacionada con el sueldo, si tienes hijos estudiando, pagas hipoteca o tienes otras cuentas pendientes, no es plan pasar a la reserva perdiendo en el trance unos cientos de euros, así que a los compañeros no les quedan mas cojones que o bien reengancharse o pasar a otras instituciones, donde por cierto ganan más, como puede ser en los juzgados. Así que eso, en vez de irse a casa, no les quedan mas remedio que pencar y seguir de uniforme.

   Y por último está la especie mas nociva, las llamadas "Ratas de cuartel", criados, trabajando y viviendo en el cuartel, los que están todo el día, si no currando, en el bar de la Comandancia, en todos los actos oficiales y no oficiales del Benemérito Instituto, que saben que si se retiran, amén de perder el pabellón, pierden lo único que saben hacer y no se largan ni con agua caliente y lo que es peor, cuando ya se tienen que jubilar por cojones, están todo el día dando porculo en el cuartel de su pueblo, por que en casa se marchitan.

   Yo lo siento, pero en cuanto llegue a la edad de retiro, voy a procurar por todos los medios no volver a vestirme de uniforme, en una empresa tan cainita, tan ingrata, que tanto pisotea a los que estamos a pié de calle, que tanto nos ha puteado, llegando uno a sufrir dolores físicos y mermas psíquicas, con los años, con los horarios salvajes y condiciones laborales centro africanas, con puñaladas traperas de jefes y sobre todo de coincidentes laborales, de trepas, chivatos, cobardes y sinvergüenzas en general, pero no todo el campo es orégano, hay compis, la mayoría, muy competentes y jefes que merecen todo mi respeto y admiración.
 
   No señor, no pienso marchitarme vistiendo el verde, espero apañarme con menos sueldo pero conservar algo de salud y estar con los míos, que luego, ni agradecido, ni pagado y en dos días se han olvidado de tí.

   Por cierto, cuando me vaya, ni quiero fiestas , ni despedidas, no pienso mirar atrás, para todo los demás, ya saben donde vivo, que aquí paz y después gloria.

https://www.facebook.com/AsociacionUnificadaGuardiasCiviles/videos/449337362273066/

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