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martes, 25 de septiembre de 2018

Algo de soledad.

  Anoche nos visitaron unos viejos amigos, estuvimos varios dándole a las rubias y luego cayeron un par de escoceses con hielo mientras fumaba en pipa. Total, sobre la una nos retiramos, yo me quedé el último a recoger.

   Después de meter sillas, mesa, tirar la basura y darle un fregado a los vasos, me preparo una ginebra con tónica y me quedo un rato sentado fuera, una temperatura de unos veinticinco grados, ni una pizca de aire y silencio de misa, tan solo roto por los Judas Priest, a bajo volumen en el equipo.

   Me tomo tranquilamente mi bebida, mientras me relajo, sin prisas, con la moto a un par de metros de mí. Es uno de esos momentos, cuando todos duermen, donde te encuentras contigo mismo y tus pensamientos.

   La noche está serena, la luna completamente llena resplandece en el cielo y la sensación de tranquilidad lo inunda todo. Tras un largo rato, me termino la ginebra, guardo todo, apago luces y echo la llave. Me coloco el casco y arranco la moto, el silencio queda roto por el motor de la Honda, me monto y tiro tranquilamente para casa, al menos el aire que te da en la cara, es algo mas fresco , alivia el calor.

   En casa todos duermen, me tumbo en el sofá a ver la tele y mañana Dios dirá....

sábado, 22 de septiembre de 2018

No lo entenderán.

  A veces, los que no me conocen me miran raro, por mi forma de vida y por como visto habitualmente, no es de extrañar. Siempre me gustó el rock, las motos y todo lo que rodea a esta subcultura. Como he explicado otras veces, me incorporé algo tarde al mundo de las dos ruedas, pues la vida da muchas vueltas y no siempre puedes hacer lo que te gusta, hay prioridades, pero a lo que vamos....

   Esto es como todo, hay mucho prejuicio, muchos vendedores de humo y mucha fachada, pero me quedo con lo de verdad, con lo bueno.

   Llegar a un sitio y compartir una cerveza con un tipo con el que ni siquiera compartes idioma, que ha llegado de otro país a miles de kilómetros y entenderte con cuatro gestos y chapurreando cuatro palabras en inglés indio. Tropezar con alguien y en vez de mirarte mal, aparecer con una cerveza y al rato estar con los brazos encima de los hombros riendo y cantando, ponerte a mirar motos y entablar conversación con un completo desconocido y terminar discutiendo sobre motores o vete tu a saber, bailar con una vieja amiga mientras tocan música en directo, o que alguna loca que yo me sé, salga corriendo hacia tí y te salte encima para darte un par de besos, coincidir con un "Ducatista" o "Harlista" en la barra de un bar y poner a parir a las Ducatis, o las Harleys mientras os jartáis de reír, beber cerveza hasta decir basta y saber que hay quien velará por tí, hacer unos cientos de kilómetros junto a un tipo que acabas de conocer, ver a los amigos de siempre o conocer a otros nuevos, reír, cantar, bailar, emocionarse, disfrutar, pasar frío y calor, mojarse, sufrir averías, o disfrutar del viento en la cara, los bares de carretera, los garitos, los conciertos, los Clubs, ver a los críos mirar embobados mientras adelantas al coche donde van, las fiestas y los funerales, las alegrías y las penas, los kilómetros con sol o con lluvia, en definitiva ser tú mismo, hacer lo que te gusta y no lo que los demás esperan de tí.

    Se que hay mucho personal con prejuicios, a mi siempre me la ha traído floja, yo, soy yo y mis circunstancias, algunos dicen haberse llevado un desengaño conmigo, otros me dicen que soy auténtico y otros simplemente me miran mal, lo que es seguro que no voy a cambiar por agradar a nadie, el que me conoce sabe de sobra como soy, lo que me gusta y lo que tengo en la trastienda, que es mas bien poca cosa.

    Igual un año de estos, a tí que me lees, si seguimos en la brecha, a lo mejor coincidimos, igual nos tomamos unas birras o quizás me mirarás raro. Eso si, como le digo a todos, si te veo y no te digo nada no es por mala educación, es por que soy muy despistado, acércate y me das el toque, por que tenemos esas cervezas pendientes y recuerda, disfruta que son dos días y que se mueran los ciezos.


miércoles, 19 de septiembre de 2018

Borreguismo.

Leo por ahí, que en guarderías suecas, visten a los niños con vestidos, al igual que las niñas y se dirigen a todos con un género neutro, ni ellos, ni ellas, si no, al parecido a "Lo", por ponerle una traducción.

Como yo digo, los padres y abuelos estamos para algo, y si nos ponemos en nuestro sitio, no hay vestido ni ostias que valgan. Relataré algo que nos pasó hace un buen puñado de años, cuando mis hijos eran pequeños he iban al colegio público de un pueblo de la España profunda.

Sería sobre el año noventa y seis , mas o menos, empieza el curso escolar y mandan la lista de material escolar, que si libretas de marca tal , rotuladores de una famosa marca alemana que costaban un huevo, reglas, y un largo etc. , amén de los libros de texto.

Claro , como el resto de los mortales nos desplazamos a Continente, que antes se llamaba así el Carrefour, y al mirar los precios de lo que pedía, se me calló el cuajo al suelo, así, sin anestesia ni nada. Con la mierda de sueldo de funcionario, uno se las ve y se las desea, para llegar a fin de mes, y antes está un kilo de pescado que unos rotuladores marca "Impronunciable".

Total, que vamos al todo a cien de un pueblo cercano y compro todo el material, sin marca, claro está, y mando a los zagales al cole. La nota de la profe para hablar con nosotros, no se hizo esperar y es que lo estaba viendo de venir,

Total, vamos al colegio al otro día y nos cuenta ella que lo que hemos comprado no vale, por que no es exactamente lo que pidió en la lista. ¡Claro señora!, usted pidió rotuladores de tantos colores, ahí están, reglas, escuadra y cartabón, ahí estan, libretas de cuadrículas, y ahí están, compás, etc.. y ahí está todo, la diferencia de precio es de diez mil pesetas, a unas mil que me ha costado todo y ni por asomo voy a comprar las marcas que usted dice, puede o bien adaptarse a mi economía o que el colegio compre el material, por que yo no lo voy ha hacer. Por supuesto que tuvo que claudicar, por que era o eso o nada.

A ver si nos dejamos de tontunas , con que van a enseñar tal o cual en el cole, con respecto a religión , sexualidad y otros temas y nos imponemos como padres o tutores, no nos dejemos pisar, defendamos nuestras creencias y no dejemos en manos de ellos la educación de los nuestros, por que ellos enseñan, pero educamos nosotros, al colegio se va sabiendo decir eso de "Por favor, gracias, buenos días y un largo etc..." no lo olvides, no seas otro borrego mas, luego lo pagaréis muy caro, engendrando y adoctrinando mas borregos.

Y si no os imponéis, os pueden ir dando porculo a todos/todas/todes, por que ser imbécil no tiene sexo, o se es, o no se es.

jueves, 6 de septiembre de 2018

25 años no son nada.

  Si, es que son veinticinco años en la empresa verde botella. En el noventa y tres, con veintisiete años, estaba afilado como una navaja, y el temario memorizado, todo listo para los exámenes y quedé el segundo en puntuación de Ceuta. Fueron nueve meses de preparación, currando en un gimnasio once horas diarias y quitándome hora y media del almuerzo, para ir a clases particulares.

Luego nueve meses de academia en régimen carcelario, donde no había ni papel higiénico y salias en chanclas a la nieve para ir a las duchas, aguantando muchos hijos de puta.
Después un año de prácticas en la famosa barriada del Príncipe, de Ceuta, donde tuve lo que se viene a llamar, una terapia de choque, ahí vi realmente lo que era la Guardia Civil, pues tras el decorado de cartón piedra, ves la realidad de este instituto.

Luego de un día para otro, te dicen que tienes quince días para preparar todo, pues te vas destinado a tomarporculo a la España profunda. Deja todo lo que conoces, familiares, amigos, lugares conocidos y vete a la sierra norte de Madrid, pilla a la familia y vete a un cuartel de mala muerte y con mas años que Espartero, con tu familia, donde el estuco se caía con la humedad, no te queda otra opción que vivir allí, pues la mierda de sueldo no da para un alquiler.

Llegas allí con los paisanos que te miran como si te perdonaran la vida, te hacen el vacío o intentan putear a las mujeres en los comercios, al cabo de los años haces buenas amistades e incluso algunos intentan que no te marches. Pasas frío, pero no como aquí abajo, frío de cojones, te putean prestando servicio a pié a veinte grados bajo cero, por que eres de los "Sindicalistas y protestones", o a mas de cuarenta grados en verano. Tienes jefes que son unos perros sarnosos , de malos que son, pero hay supuestos "Compañeros" que los hacen buenos, entre los compis, haces amistades con algunos, a otros te dan ganas de retorcerles el pescuezo.
Al cabo de varios años, a los que mi mujer y yo llamamos "El limbo", podemos pedir a Andalucía, me establezco en Mazagón, y tras varios destinos, termino en el puerto de Huelva.

En estos veinticinco años he visto de todo, bueno y malo, corrupción y gente noble y legal, muertes, heridos, ahogados, ahorcados, pero también auxilios, rescates, niños perdidos y encontrados y sobre todo, caras de agradecimiento, solo por eso, merece la pena.
 Frío y calor, horarios de mierda, medios africanos, órdenes absurdas, burocracia aún mas, jefes buenos y otros unos bastardos, pocos compañeros y muchos trepas pelotas rastreros, capaces de vender a su madre para medrar, otros a los que he tenido que enseñar los dientes, y los menos, amigos.

Después de tanto tiempo, he sufrido lesiones, intentos de apuñalamiento y agresiones, accidentes, y secuelas psíquicas, como son insomnio, cansancio y alguna baja psiquiátrica.

También he luchado por mis derechos, desde que nuestro sindicato era digamos alegal, hasta la fecha, he participado en numerosas reuniones, manifestaciones, incluso de uniforme. Aunque aún no tenemos turnos fijos, sueldo digno y queda mucho por mejorar.

En enero me quedarán tres años para poder retirarme, echando la vista atrás, ha resultado duro, a veces exasperante tirar del carro, pero al menos puedo contarlo. Veinticinco años de penas y glorias, con mi Rosa, al lado mío, en lo bueno y en lo malo, creo que ahora disfrutamos de un destino y unas mieles, que nos hemos ganado a pulso.

A los que empiezan ahora, solo decirles que es mucho lo ganado, pero a ellos les corresponde tirar de este carro y luchar por lo suyo, a los que nos queda poco, ya nos hemos batido el cobre.

Bufff, que cuesta arriba se ha hecho, pero otros han quedado en el camino.