Chapucillas moteras

Mi moto traía una especie de cajón de plástico para guardar las herramientas, con muchos recovecos, pero con poco espacio para guardarlas, así que lo desmonté, y en el hueco que quedó busqué una lata con tapadera que encajara.

Como se ve en la foto, le he hecho un agujero pasante en la tapa, para que no se abra sola con los botes o las vibraciones, poniendo un pasador.

En el fondo he hecho un agujero a la altura de la pestaña de la moto, donde la he cogido con un tornillo y un par de arandelas anchas.

Ahora entran las herramientas de sobra y con las tapas laterales no se ve nada, incluso se le podría dar una mano de pintura negra a espray, pero total, para donde está no queda mal.

Espero que os sirva de inspiración y sobre todo a bajo coste.

Tras trece años

 Resulta que son cada vez mas los que abandonan las siglas amarillas en el chaleco, ya lo dije hace años, pero simplemente me declararon "No welcome".

Es lo que tiene la endogamia, yo te visito a tí y tu a mí, y vamos donde ordenen los jefes, si, esos que se beben los cubatas gratis.

Total, que os quedáis cuatro gatos, no se cubren gastos y ahora os abrís al mundo, oye me parece estupendo, yo si sé lo que es manejar un club que no depende de ningún padrino, totalmente libre y eso amiguitos tiene su trabajo, aunque luego digáis de mí por detrás que soy un gilipollas, etc. si seré todo lo que queráis, pero jamás he rendido pleitesía, ni he obedecido órdenes de nadie.

El que diga lo contrario que me lo diga en la cara, siempre abogué en el mundo de la moto por la libertad, no esa de los posters, si no la de verdad y en eso os habéis quedado obsoletos, no está de mas recordarlo de vez en cuando, mas cuando al principio nos amenazó algún Mc y en vez de acojonarnos, tiramos para adelante, 13 años después aquí seguimos y ellos desaparecieron.

Así que nadie venga a darme lecciones, y si el "No güelcome" me la traía floja hace años, imagina ahora.

Woodstock

 Ya había visto el documental hace un porrón de años en la tele, el macro-concierto en un lugar rural del estado de Nueva York, la primera vez que lo vi, de chaval, aluciné, por supuesto, en su día en el año 70, fue todo un acontecimiento. Estados Unidos pasaba lo mas crudo de la guerra de Vietnam, el movimiento hippie que promulgaba la paz, aderezada con drogas de todo tipo, se manifestaba en las calles y aquél concierto se convirtió en un grito de mas de 300.000 personas contra el envío de tropas al Vietnam y en contra del militarismo en general. Curiosamente, cuando aquello se desbordó de gente, fueron helicópteros del ejercito, los que paradójicamente llevaron ayuda a los afectados por la falta de comida y atención médica.

Pero a lo que vamos, a nivel musical fue una pasada, casi todos los mas grandes cantantes o bandas de la época participaron, desde Joe Cocker , a Janis Joplin, pasando por The Who, Credence Clear Water Revival, (Que por cierto, no salen en la película), Crosby, Still y Nash y un puñado mas, terminando con un soberbio Jimmy Hendrix, con su mítico Voodoo Child y el himno de EE.UU. a todo trapo con su guitarra distorsionada.

He visto el documental en varias ocasiones, pero esta última y con la perspectiva que da ser una persona adulta y con los tiempos que corren, me ha dado un sentimiento de nostalgia, amén de la candidez que producen las declaraciones de los entrevistados en aquel entonces. La gente llena de ilusiones y proyectos de un futuro mucho mejor. Los chavales hablando de paz, amor libertad y demás chorradas utópicas, alentados por el momento y la situación. Lo que hace 40 años me parecía algo de locos, ahora me hace sonreírme, ¡Qué ilusos eran!, ¡Qué inocencia!, en fin, ¿Dónde habrán quedado todos esos sueños?.

Recomiendo verlo, aunque sea sólo por la música, pero tampoco es simplemente un concierto, es algo mas, los ecos de una época que no volverá jamás.

Mas series.

 Pues un par de series, empecemos por la buena, Dinero y Sangre, un producción francesa, sobre un caso real de desfalco a las arcas públicas de Francia, por unos listos que vieron un vacío legal en el impuesto a la mal llamada "Huella de carbono" a la industria, donde el estado premiaba con un 20% a las empresas que contaminaban poco, así creaban empresas ficticias, cobraban ese 20% y seguidamente se llevaban el dinero a un paraíso fiscal, desapareciendo la empresa y su puta madre, el negocio perfecto, que generaba millones cada semana. 

El inspector del fisco francés tras varios años persiguiendo a los malversadores, al final logra su objetivo. Muy buena serie, pero demasiado larga, le sobran varios capítulos y le falta algo de dinamismo, se entretiene demasiado en los detalles. Aunque es muy realista y te hace ver como los gobiernos despilfarran nuestro dinero con las leyes ecológicas, al final los que ganan son los empresarios listos. 

La otra es Barrio Inglés, de factura patria y rodada en Huelva y alrededores, tras tres episodios, pues, uffff, no es para tanto el bombo que le han dado, buena factura, ambientación, etc. se nota que han gastado algo de dinero, pero que queréis que os diga, muy estereotipada, los alemanes son todos malos, malísimos, nazis de Indiana Jones y los ingleses muy buenos, adalides de la libertad, la concordia y la lucha contra el fascismo. Te pintan una España que no parece de posguerra, mucha niña bien, escenas ridículas, como un cargamento de mineral que sacan los ingleses y cargan en cajas de madera movidas por dos tipos, en general pintan una España irreal.

Y hablando de los ingleses, esos tipejos que se instalaron en Huelva como una gran garrapata, que extrajeron todo lo que pudieron y con su mentalidad colonialista, trataron a los españoles como mano de obra barata y desechable, aquí los ponen como unos tipos amables, leales y condescendientes con los españoles. A mi modo de ver los alemanes tendrían que haberse concentrado en las islas británicas y haberlos borrado a todos de la faz de la tierra , pues como bien dijo Blas de Lezo, "Todo español que se precie como tal, ha de mear mirando hacia Inglaterra".

Bueno, a ver si termino de verla, le doy un 5 pelao, por la ambientación y vestimenta, etc. como historia, pues como una de Hollywood del Aliexpress.