Vistas de página en total

martes, 10 de enero de 2017

Líbrame de los tibios.

Reflexión del día.

Y es que no hay cosa peor que alguien tibio, esos que ni fú ni fá, que por delante blanco y por detrás negro, que con los azules, son azul marino y con los rojos, son bermellón, gente sin criterio, equivocados o no, pero sin sangre en las venas, delante tuya de una manera y por la espalda de otra, con miedo a decir lo que piensan, por no perder clientes, por no perder favores o por no caer bien en su círculo. Ni arriba, ni abajo, ni a la derecha, ni a la izquierda, contigo escuchan Rock y con otro Regetón. Dicen una cosa y si los critican, la cambian, o la borran, no hablan con el corazón, ni con el cerebro, miran para un lado o para otro, según de donde sople el viento, ni chicha, ni limoná, ni carne, ni pescado. No dan la cara, prefieren ocultarse en un logo, escudo o avatar, tiran la piedra y esconden la mano, defienden lo que le marcan las modas o sus amos.

Como leí a Arturo Perez Reverte: "Temo mas a un imbécil, que a un malvado", y que verdad es esa, cuídate de los tibios, pues cuando mas falta te hagan, mas te van a dejar tirados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario