Vistas de página en total

jueves, 24 de noviembre de 2022

Ecología de salón.

 Y resulta que en los años 60,s había la misma temperatura media que ahora, que nos la meten doblada con lo del cambio climático, de paso cuatro listos se enriquecen a costa de la ecología, la niñata esa de culo cagado, chubasquero amarillo y coletas ya es millonaria junto a sus papás y Al Gore el ex-vice de los EEUU, dando charlas, saca mas dinero que tu que me lees y yo juntos en cinco vidas.


Los mapas del tiempo los ponen en color rojo volcán, para asustarnos, aunque estemos a 25 grados y que nos quieren meter a martillazos el coche eléctrico, que tras un par de años las baterías pierden eficiencia y te dejan tirado con la mitrad de kilómetros útiles, siendo el coste de la batería la mitad del precio y un largo etc... , cuando todos ellos viajan en avión o coche blindado.

Mientras, discutimos si la tierra es plana y que si todo el que muere es por las vacunas, ni en las peores pesadillas de Orwel se leería lo que sucede en nuestra vida cotidiana. Nuestra sociedad queda bien reflejada en la película "No mires arriba", la destrucción total viene hacia la tierra y se discuten cuestiones morales y tontunas varias.

Siempre he sido crítico con la ecología de salón, cuando voy al campo, la playa o en mi propia calle, procuro quitar mas basura de la que llevo, no joder la naturaleza y procurar no estropearlo todo, no voy a mejorar el medio ambiente por un puto Tesla. Me da la risa floja cuando leo a algún "Verde" intentando vender su ideología y que se cree mejor por que separa la basura.

Como dije hace tiempo, no quiero escribir ni hablar sobre los hijos de puta que nos gobiernan, pero alucino con cuanto crédulo cabeza plana, que pulula en nuestra sociedad y que cuando abre su bocota, suelta paridas que tan solo calan en los cortos de mente.

Es por eso que un pueblo instruido, es poco manipulable, por desgracia, hay una gran mayoría que es manipulada, engañada y saqueada, encima aplauden, mientras el meteorito se sigue acercando.

miércoles, 23 de noviembre de 2022

Insolidario de mierda....

 Pues ahora que se acercan los eventos navideños, digo como en años anteriores, conmigo no contéis, ya escribí en su día la experiencia de donar juguetes y ver como el niño "Necesitado" y ante las risas de su mamá, pisoteaba y destrozaba lo que le había tocado, era un pequeño cafre norteafricano, pero bien podría haber sido paisano. Además viendo como tiran a los contenedores la comida que no les interesa, mi postura es la de pasar de actos solidarios, si, sé que iré al infierno, pero a estas alturas me la trae flojísima.


Cuando doy ropa o algún tipo de ayuda, se la doy al interesado en mano, a alguien que conozco y sé que le va a dar buen uso y por supuesto que sea español, para los de fuera ya hay ayudas de sobra del gobierno, por ejemplo mi hija madre soltera y con dos hijos, se tiene que buscar la puta vida, habiendo yo cotizado toda mi puñetera vida, desde los 16 años, si, en ése aspecto soy intransigente, racista, facha o como coño lo queráis llamar, pero es lo que hay.

Así que eso mismo, soy un tipo totalmente insolidario con quien no conozco, no quiero en mi país garrapatas, ni gente que no se quiere integrar, que quede bien claro.

Es por eso que a mí no me veréis en ningún evento festivo-navideño tipo recogida de regalos o alimentos.


lunes, 21 de noviembre de 2022

Buah, como mola jo tío.

 De vez en cuando, por esto del Gran hermano que nos vigila, pues me salen productos motoriles-ri-le-rón sin ton ni son.

Lo que me pregunto es si es que nos toman por gilipollas o qué.

Hace un tiempo me pillé para un casco unas gafas de Aliexpress, muy baratas, cinco o seis euros y hacen el apaño, lo único es que la goma espuma que toca la cara, se despega, cuestión de darle un poco de pegamento y a rular.

Mas tarde en Decathlón vi unas de esquiar que casi por el mismo precio se veían de mucha mejor calidad y me compré unas, que son las que llevo actualmente en el casco, de pantalla amarilla, para que sirva de día y de noche, la verdad que son cómodas y después de mas de un año, sin pegas, como la de la foto de abajo.

Pues como iba diciendo me sale publicidad de ropa de esta tipo "Café racer", que ahora se ha puesto de moda ir en plan británico, con semi-manillares en la "Bike" y rompiendo la pana con cascos vintaje-aje y toda la parafernalia, veo que hay gafas como la que llevo yo mas o menos, cuando veo el precio se me cae la mandíbula al teclado...

El caso es que los amantes de los Levis de mas de cien euros y llevar un polo con un jinete de dos palmos en el pecho, seguro que se las pillan, para faldar el domingo con la chati y los coleguis a la hora del "Brunch" o del Vermú, llegar a la terraza del pub, quitarse el casco de mil pavos y molar mazo, con mas de cinco mil en ropa y complementos, jo tío que me lío.

En fin chavales, los que tenemos los pies en el suelo y peinamos canas, flipamos cantidubi con las nuevas modas, y si no lo creéis, os dejo fotos.




viernes, 18 de noviembre de 2022

Si, son feas de cojones.

  Seguía no hace mucho la página de un conocido mecánico de Sevilla, donde mostraba las motos en las que estaba trabajando, el tipo es buen mecánico, todo hay que decirlo, pero si pones fotos en una página abierta al público, has de estar a las duras y las maduras, por eso mi página del Face la tengo privada, para que sólo la lean mis amigos, que son a los únicos que les acepto críticas. 

Total, a lo que vamos, puso una foto de una de estas nuevas Harleys "Street-no-sé-que", de 750 cc. moto que desde que la sacaron, me pareció fea, sosa e impersonal, el tipo al leerlo me dijo que era una falta de respeto hacia el dueño, ¡Pero si es fea la moto! contesté, al dueño le gustará pero para mí es fea, pero no p´a un rato, p´a siempre, el tipo borró mi comentario y me dijo que era un cobarde por esconderme desde internet, le dije que nunca me he escondido y que incluso nos conocemos en persona, pues en un par de ocasiones he estado en su taller para llevar a otro con su moto, entonces se calló, claro, seguidamente lo bloqueé, por bobo, ahí se queda con página sus motos y su pedestal. Si no te gustan las críticas, no expongas tus trabajos, so melón, si no, pues te jodes.

Y seguimos con las motos feas, quitando la Jarly esa que es horrorosa, el mundo custom está de capa caída, por ejemplo Honda con la nueva Rebel, que es un insulto a lo que tiene que ser una moto custom, igualito que las líneas de la Shadow y si hablamos de la nueva Kawasaki Vulcan, mas de lo mismo, ¿Neo-retro-custom?, ¿Pero qué mierda es ésta?. Si, para sus dueños serán la repolla, pero son feas, feas no, feísimas, sin alma y sin su dosis de rocanrol y que tengan equis caballos de potencia y que corran como un tiro, me la suda, si quiero correr me compro una "RR", incluso Harley con sus nuevos modelos la está cagando, véase la nueva Fat Boy, Sportsters , etc... aunque no son feas de líneas, no, no te enamoran como sus antecesoras.

Llamadme anticuado, mamarracho o como me dijo uno, que estoy anclado en el pasado, pero los diseñadores son unos mierdas, las motos son feas se pongan como se pongan y prefiero ser un cromagnón a un viajero intergaláctico, montando en un cohete interestelar con ruedas. 


La foto la dedico con cariño a los que dicen que no doy la cara y me escondo.



Adaptando defensa de moto.

 Proceso de adaptación de una defensa a una Suzuki , usando los anclajes originales, o sea, sin agujerear nada, la defensa venía muy grande y tocaba en el suelo al tomar las curvas, así que le hice un corta-pega, con refuerzos interiores, luego un pintado y a rular. 

Os dejo una secuencia de fotos del trabajo.




















miércoles, 16 de noviembre de 2022

Cambio cables bujías.

Digamos que no es un trabajo muy complicado, pero mejora la chispa y la estética de la moto, hay muchos tipos de cables, de colores, con trenzado etc..., elegí estos por ser azules, a juego con el color de la moto y  eran de un metro de largo cada uno, al tener cuatro bujías mi moto, dos por cilindro, tuve que comprar dos. No tiene ninguna dificultad, ir quitando los viejos e ir cortando a la misma medida, la única pega fue el grosor, pues al ser de coche, tenía un par de milímetros de mas, por lo que no entraban en las pipas, así que simplemente con lija bien gruesa, se le rebaja en los extremos ese exceso de material hasta que entre bien en sus alojamientos. Visualmente quedan bien, mejor chispa al ser de silicona y materiales mas modernos.






 

lunes, 14 de noviembre de 2022

Adornos para la moto.

 Como siempre estoy ideando cosas para la moto, se me ocurrió cambiar el insulso pulsador de intermitencia de la Flaca, algo muy sencillo como veréis, además tengo algunos otros detalles por ahí que os voy a enseñar, por si os sirve de inspiración, se puede hacer con dados, calaveras, etc..., todo es ponerle imaginación.

En éste caso, con un pequeño dado, con un taladro del diámetro del vástago del botón, con pasta de dos componentes hacemos un poco y rellenamos el agujero.

Por supuesto primero hay que sacar el botón , que al ser de goma es hacer palanca y sale.





Ahora sólo queda meter a presión y quitar el sobrante de pasta si lo hay y esperar que seque, no os preocupéis, el del tirador del aire lo puse así cuando compre la moto hace años y no se sale ni de coña.


Este es otro detallito, simplemente agujerear el dado o lo que te guste con el diámetro del brazo del retrovisor, que entre justito y unas gotas de super glue.  


Como os dije antes, el tirador del aire, el mismo método que con lo de los intermitentes.



Aquí lo que hacemos es taladrar la bola ocho con un diámetro ligeramente inferior al de la válvula, luego con una vieja, igual en cualquier taller te regalan una que tengan para tirar o un tornillo de rosca similar, lo calentamos y hacemos la rosca en el agujero, luego es cuestión de roscar y listo, si, sé que las venden, pero en los chinos las hay de este tipo muy baratas.


Bueno, espero que os haya gustado.


domingo, 13 de noviembre de 2022

La playa.

 

La playa

 

Correría el año ochenta y tres, trabajaba en un bazar de Ceuta, de esos que lo mismo te vendían condones, que wisky, radiocasetes o un pijama chino, se curraba a destajo, muchas horas, pero mal pagadas, casi al límite de la explotación, pero había algo que prevalecía entre los que currábamos allí, era la camaradería. No es que saliéramos juntos siempre o estuviéramos pendientes en nuestra vida privada los unos de los otros, pero el estar puteados en un trabajo, hace que se creen unos vínculos diferentes, son situaciones donde los que están al mismo nivel, se unen, se tapan los fallos y defienden, para que el jefe no triunfe.

En aquel entonces éramos cuatro los dependientes en la tienda, Paco, el mayor, Miguel, Fernando y el mas jovenzuelo yo, Javi, con diecisiete años. Por supuesto al ser el mas joven y novato, me gastaban gran cantidad de novatadas, pero al fin y al cabo al final nos reíamos todos y lo primero era burlar la vigilancia del jefe, tarea en la que nos convertimos en unos especialistas. Cuando no había clientela nos buscábamos la vida en el almacén para hacer como que currábamos pero sin hacer nada, pues allí nunca se podía estar de manos cruzadas, así de cabrón era el susodicho.

También de vez en cuando quedábamos, para ir a tomar algo, pero lo mejor eran las excursiones a la playa, a pasar la noche junto a una hoguera. Íbamos a una zona de Ceuta conocida como Calamocarro, junto a la carretera de Benzú, que discurre junto al mar y cruzando la misma, el monte. La mayor parte de las playas de aquí son de acantilados, roquedales y grava, alguna tiene arena, pero aportada por dragas, pero como digo casi todo son cantos rodados, de mayor o menor tamaño, redondeados por siglos de embates del oleaje, algunos del tamaño de un melón, pero en otras zonas como cuentas de un collar. Esto hace que el agua, que da a la cara mas atlántica, además de fría, sea totalmente transparente, de modo que con el mar en calma, se puede ver perfectamente el fondo marino, e incluso las criaturas que bien en él.

Un Sábado quedamos para echar la noche en una de esas pequeñas calas, en un lugar con la grava mas fina, para no dejarnos los riñones en el suelo. Por una rampa que bajaba a la playa, bajamos las motos, Paco con su Derbi Tricampeona, de color oro viejo, la de choteos que nos dábamos con lo de tricampeona y yo con un Vespino, donde los cuatro nos desplazamos con todo lo necesario para pasar la noche. En los ochenta no había tanta gilipollez con la seguridad e ir cuatro tipos en dos ciclomotores hasta las trancas de bultos, no era motivo para poner en riesgo la seguridad nacional, ni ser unos delincuentes, como ocurre hoy en día.

Así que bajamos las motos y las colocamos en ángulo, dando la espalda al aire predominante de poniente, tapamos con unos toldos los laterales e hicimos con una vieja manta, un precario techo, amarrado a unas piedras y a las motos. Mucho vino y Coca Cola para beber, de comer, pues era lo de menos, bocadillos y algún embutido o lata. Luego un hueco en la arena y con unas buenas piedras alrededor, a buscar madera por la playa y todo estaba listo.

Lo que no podía faltar, por supuesto, era el radio casete y un buen puñado de cintas, sobre todo rock, metal y progresivo, música electrónica, etc…

Caía el sol, la hoguera encendida y entre sorbo y sorbo de calimocho, venían las bromas, las charlas, las confidencias que solo la amistad mezclada con alcohol, pueden hacer posible. Después de comer, beber y a gusto con el mundo, tumbados en la esterillas, tapados con mantas o sacos de dormir, escuchábamos en la radio a Pink Floid, a bajo volumen, La cara oculta de la Luna, aderezada con el rumor de las olas y el soplo del viento, la hora mágica, cuando el sopor del alcohol y Tangerine Dreams, con sus ecos electrónicos y el sonido del mar, roto solamente con el rumor de algún coche que pasaba por la carretera, con casi nula circulación a esa hora de la noche. La hora de los sueños, la hora de los pensamientos que vuelan alto, la música que te hacía viajar entre la vigilia y el sueño a lugares ignotos.

Bien entrada la madrugada, con unas ganas de mear tremendas, me despierto, con el cuerpo algo dolorido por dormir en una esterilla, me apoyo en los hombros y varios pares de ojos brillantes me miran desde la oscuridad, miro bien y era una camada de perros asilvestrados, que seguramente al olor de las sobras de comida, andaban alrededor nuestro para ver que podían llevarse. Me siento y despierto a los otros, “¡Oye, que estos cabrones nos van a comer!”, todos dieron un salto para espantarlos, alguno de los perros gruñeron y se enfrentaron, hasta que uno de nosotros con un palo los hizo correr a lo largo de la playa.

 

“¿Qué hora es?”, preguntó alguien, podrían ser las cuatro o las cinco de la madrugada, después del susto, nos volvimos a tumbar, reavivé la candela medio apagada y de paso seguimos escuchando música a media voz, como si te susurraran los acordes al oído.

Al otro día , tocaba recoger, los cuerpos doloridos, pero con la juventud todo se lleva mejor, con el día y la luz del Sol, se acababa la magia, volvíamos a la realidad. Mañana Lunes tocaba trabajar y volver a la rutina, pero ya habrían mas ocasiones de pasar una noche de acampada.

Con el tiempo cambié de trabajo y ellos también lo fueron haciendo, y aunque coincidía con algunos de mis excompañeros de trabajo en ocasiones, ya no era lo mismo, ley de vida, después de tantos años y yo fuera de mi tierra, no sé nada de ellos, creo que siguen en Ceuta, como casi todos, casados, con hijos, con otros problemas y alegrías, pero esos viejos recuerdos, esos pequeños momentos mágicos, perdurarán en mi mente siempre.


 Playa de Calamocarro en Ceuta.



sábado, 12 de noviembre de 2022

Nada nuevo bajo el Sol.

 Ja,ja,jaaaa y mas ja,ja,jaaaaaaaaaaa. 56 años sin que me haga falta ningún cenutrio, me puedo pegar otros tantos sin necesitarlos, ni necesidad de haberlos conocido, fíjate, sigo igual de hermoso o mas sin ellos y luego dicen que si el karma me llegará y demás monsergas, leídas en un copia y pega de Paulo Coelho.


Iros a la mierda, so bobos, que tengo muchos kilómetros para tontunas de bragas cagadas, moteros de pastel y odiadores de redes sociales, antes de conoceros era así, lo sigo siendo y lo seguiré hasta que el cura me de la extrema unción.

Decís que no digo las cosas a la cara, pues el que quiera saber, que pregunte, me veis a menudo y no os acercáis a decirme por qué, ya lo expliqué al que me preguntó y no sonaron las trompetas de Jericó.

Que el tiempo pone a cada uno en su sitio, ja,ja,jaaaaaaa, pues como siga pasando, no sé donde me va a poner a mí.

No, no estoy cabreado, es que me da la risa floja, el mundo no gira a vuestro alrededor, ni al mío, cada cual a lo suyo y el que tenga problemas, ya sabe donde ando, siempre lo he dicho, nunca me escondí y si, seguiré escribiendo lo que me salga de las gónadas, para lo bueno y para lo malo, me dicen que por que me meto en estos berenjenales, pues sencillo, por que puedo, no debo pleitesía a nadie, nadie maneja mis hilos y por encima de todo, por que me sale de los cojones, que ya estoy jarto de decirlo, meteos en vuestra puta vida y dad los consejos a los chavales de 15 años, que yo peino canas.

Y todo el día matando tontos y no queda dinero para cartuchos... 

(Dedicado a mis odiadores oficiales, que de seguro me están leyendo).

viernes, 11 de noviembre de 2022

Asiento de muelles Shadow.

Pues siguiendo con las chapuzas motoriles, en esta ocasión os enseño un asiento de muelles de segunda mano hecho un desastre, lo retapicé en cuero tratado, fabriqué una base para la Honda Shadow, creo que casi imposible de encontrar en el mercado de repuestos, compré unos muelles, de paso hice una tapa plástica para ocultar el hueco de la batería y todo lo necesario para acoplar el asiento en la moto. Si os fijáis, en el proceso la moto ha cambiado de color, no no es otra moto, es que aproveché para pintarla.
Espero que os guste.

Sacando un molde de cartulina para la tapa de la batería

Todo desmontado y el asiento que venía en polipiel blanco.



Enfrentando la base donde irán alojados los muelles, aprovecho los tornillos que sujetan el guardabarros trasero.


Proceso de tapizado, trabajo de chinos, pero merece la pena.

La tapa en plástico negro y pintando la pletina.


Mientras seca una cosa, seguimos con el asiento.


Menos de 30 euros este trozo de piel.




Un trozo de neopreno y así protegemos la electrónica mejor de la humedad.
Detalle del anclaje delantero del asiento aprovechando el tornillo del depósito.
Y trabajo terminado.